sábado, 12 de enero de 2019

Error maldito

12018.10.27 1:39am

A veces llegan las noches
que no se pueden calificar de frías.
Hoy quiero convertirme en espectro
y atormentarte para siempre con mi ausencia.

Tratando de evitar que mi amor por ti se convirtiera en odio
lo más que logré fue masticar una sonrisa sin desprecio
que armoniza con un coro de suspiros y parpadeos en desasosiego.

Y no tienes culpa
pero no cometeré el error maldito de decir lo siento
pues no quiero sentir y aquí se hace lo que yo quiero.
Seguramente eso me hace ganador en tu mentalidad
de impulsiva competencia y subconscientes méritos.
De individualismo e independencia,
de ilusoria autosuficiencia.

Jamás escalaría un solo peldaño para reclamar tal trofeo.

Dejaré que mi espectro lo haga por mí,
para que lo levante en su magno salón vacuo,
y se quede solo así…
Contemplando la injusta imagen
que se inventó de ti.
Solo y sin intervención.
Como me dejaste estos años,
como me dejaste esta vida.

Bien se lo merece quien sea que se declare ganador de desamor.

En mi mundo lo que consigo es libertad,
el alivio de olvidar su frívolo silencio sin borrarles.
Olvidar lo que nunca quisieron ser y tanto anhelo.

La libertad de ver ese deseo renacer espontáneo
en alguien más sin saber cuándo pasará.
Alguien cuyo orgullo no tenga
agente de bienes raíces en su corazón.

Y el día que se manifieste me infectará
sin explicaciones, sólo con valor.
Ese valor hoy inexistente.

La devoción de dejarse desarmar
y actuar en desnudez y aferro.

El valor de salvaguardar la realidad de nuestra mutua ilusión.

No hay comentarios: